Capítulo 758
Capítulo 758
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Capitulo758
Walter acababa de dejar la casa de Mateo, y su expresión habia evidentemente cambiado por completo.
Su secretario lo siguió muy cauteloso y le preguntó sorprendido: -Walter, escuché tu conversación con
Mateo en el estudio. ¿Por qué estás apoyando el matrimonio de la señorita Jimena con Alejandro?
-¿Crees que Alejandro se casará con Jimena?
Walter sonrió burlonamente, -Alejandro se ha causado grandes problemas por Clara. Hace poco casi
perdió la vida por ella. Está claro que todavía tienen sentimientos el uno por el otro, pero mi sobrina es
una joven muy terca y voluntariosa. Alejandro no se casará con ella. Yo sé que Alejandro no cometerá
ese grave error fácilmente, por eso estoy avivando el fuego y apoyando el matrimonio de Jimena con
Alejandro. Así podremos desestabilizar la situación, enfriar la relación previa entre Rodrigo y Alejandro.
Cuanto más caótica sea la situación, mejor será para nosotros.
-Eres muy astuto–el secretario exclamó con gran admiración.
En los ojos de Walter brilló una maliciosa chispa. -Desde siempre, la mejor manera de separar a los hermanos es utilizando a una mujer; y eso es lo que haré.
Justo cuando iba a bajar las escaleras, se dio cuenta de algo y preguntó en voz baja: -Por cierto, ¿cómo
se llama esa chica de la familia Hernández que Rodrigo mencionó anteriormente, la que Rodrigo ha
estado manteniendo fuera?
-Noa.
-Bien, vigilala de cerca. Podemos sacarle algún provecho.
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-¡Rodrigo, me duele! ¡Por favor, sueltamel This content belongs to Nô/velDra/ma.Org .
Rodrigo, con una mirada feroz y el rostro frió como el hielo, tiró del brazo de Jimena, arrastrándola comor
un costal hasta una habitación vacía.
Apenas cerró la puerta, Rodrigo levantó su fuerte brazo y arrojó a Jimena al suelo con gran brutalidad.
Jimena cayó con torpeza, sintiendo un dolor agudo en su cuerpo y viendo cómo le aparecían moretones.
en su brazo.
-Jimena, necesitas decirme toda la verdad sobre lo que pasó en el hotel–gritó Rodrigo, luchando por contener su ira. Cualquier otra persona podría haberla matado en ese momento.
-No sé de qué estás hablando–Jimena respondió, respirando agitadamente y negándose a confesar.
-Tu mente no podría haber ideado un plan tan complicado y malévolo. Alguien te está manipulando
desde las sombras–dijo Rodrigo, acercándose y mirándola intensamente con sus ojos enrojecidos. -i
Dime quién está detrás de todo esto!–
El corazón de Jimena latia con gran fuerza, y el sudor frio le recorria la espalda.
¿Cómo podria decirle a Rodrigo? Además, solo estaba siguiendo las instrucciones de esa persona, ini
siquiera sé quién es esa persona!
Asi que apretó los dientes y le dijo con gran determinación: -Nadie me ayudó, todo fue idea mia.
-Jimena! ¿Sigues mintiendo en esta situación?
-¿Qué pasa? ¿Qué expresión es esa?
Jimena rio burlonamente, -¿No estás contento? ¿Quieres golpearme o matarme?